¿Cuál es el impacto del fuerte terremoto repentino en Turquía en la industria fotovoltaica?

Un terremoto de magnitud 7,7 sacudió el sureste de Turquía cerca de la frontera con Siria en la madrugada del 6 de febrero, hora local. El epicentro se ubicó en la provincia de Gaziantep, Turquía. Los edificios se derrumbaron a gran escala y decenas de miles de personas murieron o resultaron heridas. Al cierre de esta edición, todavía hay una serie de réplicas en el área local, y el alcance del impacto del terremoto se ha expandido a toda la parte sureste de Turquía.

La industria de fabricación fotovoltaica de Turquía se vio menos afectada por el terremoto, ya que solo afectó alrededor del 10% de la capacidad de producción de módulos.

La industria de fabricación fotovoltaica de Turquía está ampliamente distribuida, principalmente en el suroeste y noroeste. Según las estadísticas de EnergyTrend, un nuevo centro de investigación de energía de TrendForce, la capacidad nominal de producción de módulos fotovoltaicos locales en Turquía ha superado los 5 GW. Entre ellos, CW Enerji y Smart Solar son los mayores fabricantes de módulos fotovoltaicos de Turquía y su capacidad de producción nominal es de aproximadamente 1 GW, respectivamente. Debido a su ubicación geográfica, la mayor parte de la capacidad de producción local de módulos no se ha visto afectada por el fuerte terremoto. En la actualidad, solo se ven afectadas algunas fábricas de módulos de pequeña capacidad en el área del terremoto. GTC (alrededor de 140MW), Gest Enerji (alrededor de 150MW) y Solarturk (alrededor de 250MW) representan alrededor del 10% de la capacidad total de producción de módulos fotovoltaicos de Turquía.

Según los informes de los medios de comunicación locales, el fuerte terremoto continuo ha causado grandes daños a los edificios de la zona. La resistencia sísmica de la energía fotovoltaica en tejados depende principalmente de la resistencia sísmica del propio edificio. Los deslizamientos de tierra a gran escala de edificios de baja y mediana altura en el área local han causado daños irreparables en algunos sistemas fotovoltaicos en los techos. Las centrales eléctricas fotovoltaicas terrestres generalmente se construyen en áreas remotas con terreno plano, con pocos edificios circundantes, lejos de edificios de alta densidad como ciudades, y los estándares de construcción son más altos que los de la energía fotovoltaica en la azotea, por lo que se ven menos afectados por los terremotos.

El sismo también provocó explosiones en dos secciones separadas de un gasoducto en la provincia de Hatay. Según informes de medios extranjeros, el operador estatal de gasoductos de Turquía, Botas, ha suspendido la entrega de gas natural a través del gasoducto a las provincias de Gaziantep, Hatay y Kahramanmaras. Además, la terminal petrolera de Ceyhan, en el sur de Turquía, también ha suspendido sus operaciones debido a su proximidad a la zona del terremoto. El transporte de energía está bloqueado y el consumo de energía local se está reduciendo. Las centrales eléctricas terrestres fotovoltaicas se pueden utilizar como suministros de energía de emergencia en trabajos de rescate posteriores a un desastre para garantizar las necesidades básicas de electricidad de los residentes.